viernes, 20 de diciembre de 2013

AHÍ AL LADO

Cetáceos y tortugas oirán cada 10 segundos una 'explosión nuclear'


  • La campaña sísmica pone en jaque la fauna marina del Golfo

  • Ricardo F.Colmenero
La búsqueda de petróleo a tan sólo 50 kilómetros de las playas de Ibiza ha entrado en su fase final. La petrolera escocesa Cairn Energy ya ha dispuesto sus cañones sísmicos para detonarlos a 249 decibelios, por encima del estruendo que causó la bomba de Hiroshima, hacia el subsuelo marino del Golfo de Valencia, en búsqueda de bolsas de petróleo.
El Área de Industria y Energía de la Delegación del Gobierno de Valencia anunció el pasado sábado en el Boletín Oficial del Estado la exposición del estudio de impacto ambiental de una conflictiva campaña que se extenderá a lo largo de 75 días sobre una superficie de 2.420 kilómetros cuadrados.
Un barco de unos cien metros de eslora disparará cada diez segundos aire comprimido hacia el lecho marino desde una profundidad de entre seis y siete metros. Sus ondas se transmitirán por la capa de agua y parte del subsuelo, y su reflejo sonoro regresará hacia unos hidrófonos colocados en ocho cables (streamers) de ocho kilómetros de longitud cada uno, y que son también remolcados por la embarcación.
A bordo del barco se realiza un chequeo rápido de los datos para posteriormente elaborar unos «perfiles de reflexión» de cada una de las partes investigadas, que determinará los mejores puntos para una posible perforación, según informan desde el BOE.
La compañía dice que subirá el volumen poco a poco para que la fauna pueda huir
Todos los informes científicos aseguran que las ondas que penetran en el lecho marino afectan al sistema de colocación de los cetáceos, alterando su comportamiento, capacidad de alimentación, orientación y rutas migratorias, además de provocar efectos devastadores para la pesca, que en las zonas en las que se realizan las detonaciones quedan literalmente arrasada.
Según los estudios elaborados tanto por la Universidad Politécnica de Valencia, a instancias del Gobierno valenciano, como por el Cabildo de Lanzarote, la aparición de cadáveres de cetáceosdesorientados en las playas suele una de las principales consecuencias de estas detonaciones.
La Comisión balear de Medio Ambiente subrayó que la comunidad científica ha adoptado los 180 decibelios (el ruido de un cohete espacial al despegar) como el nivel de intensidad acústica a partir del cual se pueden producir males fisiológicos irreversibles en cetáceos y tortugas marinas, por lo que podrá reclamar la reducción de estos niveles hasta el próximo 24 de enero, que finalice el periodo de alegaciones a este Estudio de la petrolera.
«Antes de comenzar la adquisición sísmica se llevará a cabo un procedimiento de arranque suave en el que el sonido se emite a menor intensidad al principio y se va aumentando hasta alcanzar la intensidad necesaria para la actividad sísmica, lo cual permite a los mamíferos marinos alejarse del área de estudio antes del comienzo de dicha actividad», señalan desde la compañía.
Además, dicen que se contratarán Observadores de Mamíferos Marinos para trabajar en el buque sísmico, que harán uso de Sistemas de Monitorización Acústica Pasiva las 24 horas del día que ayuden a detectar la presencia de mamíferos marinos en el área de estudio.
Alianza Mar Blava tilda de "trampa" el Estudio de Impacto Ambiental
La Alianza Mar Blava, que lucha desde Ibiza contra las prospecciones, ha asegurado que plantear por fases el proyecto petrolífero en Ibiza «es una trampa», y que deberían presentarlo en su conjunto porque hay que analizar globalmente todos los impactos ambientales.
Se trata del mismo argumento defendido el pasado mes de octubre por el director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea (CE), Karl Friedrich Falkenberg, que manifestó a los presidentes insulares de Ibiza y Formentera no estar de acuerdo con que la evaluación de impacto ambiental se plantee de forma parcial. De esta forma se evitarían, por ejemplo, los daños de las prospecciones sísmicas si finalmente el impacto ambiental lo que censura es una perforación.
La compañía se ha defendido a través de su gabinete de prensa en España asegurando que hacen los estudios de forma parcial porque así se lo ha pedido el Gobierno.
El coordinador de la Alianza Mar Blava, Carlos Bravo, asegura que seguirán «trabajando para evitar que se lleven a cabo estos sondeos», y para que «el Ministerio vea el daño que puede provocar esta primera fase».
Para Bravo, esta fase «es muy importante» porque «está demostrado su efecto negativo». Es por ello que presentará las pertinentes alegaciones, y volverán a instar al Ministerio de Medio Ambiente para que no conceda la autorización ambiental al proyecto.
Según ha lamentado la Alianza, en el BOE se pone de manifiesto que durante la campaña se utilizarán potentes fuentes de sonido, lo que de por si «ya es una causa de graves daños a la pesca».
«Vamos a trabajar para que el problema se conozca y que haya una movilización importante», ha concluido.
fuente: EL MUNDO